El presidente del Gobierno y líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ha afirmado hoy que necesita una "victoria amplia" en Catalunya para frenar al PP tras advertir de que CiU no se define entre un PSOE que ha apoyado a Catalunya y un PP que ha ido "en contra" de los intereses y de la identidad catalanes.


Zapatero ha participado en una comida en Lleida, junto a unos 2.200 militantes y simpatizantes del PSC, en la que ha estado acompañado también de la cabeza de lista del PSC en las generales, la ministra Carme Chacón, y la candidata leridana Teresa Cunillera, entre otros dirigentes.

Tras el mitin de esta mañana en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), el líder socialista ha subrayado en Lleida: "Advierto: hay algunos partidos que dicen que van a esperar a después del 9 de marzo para ver si apoyan a Mariano Rajoy o a mí, y yo les digo a los ciudadanos de Catalunya y de Lleida que no pueden esperar a después del 9 de marzo, sino que elijan directamente".

"Que elijan directamente si quieren a un Gobierno presidido por mi o uno con lo que representa la derecha, que ha tenido una actitud que ha sido muy negativa hacia Catalunya", ha agregado.

Zapatero, que antes en L'Hospitalet se ha conjurado con el presidente catalán, José Montilla, a seguir trabajando juntos desde el Gobierno y la Generalitat al margen de posibles alianzas postelectorales, ha aprovechado su acto en Lleida para dejar claro que no quiere esperar a ver si cuenta o no con los nacionalistas catalanes tras el 9 de marzo para amarrar el Gobierno de España.

Ante la actitud de CiU, formación a la que no ha citado explícitamente, Zapatero ha pedido a los catalanes que "no esperen", que se definan ya. Zapatero ha defendido su proyecto progresista y "de vanguardia", con políticas en favor de los derechos civiles y del crecimiento económico -ha vuelto a apostar por superar a Francia en PIB dentro de cuatro años-, y ha subrayado que quiere seguir cuatro años más en esa dirección contando con el apoyo de "la mayoría de los catalanes".

En este sentido y para "tener una amplia mayoría en España y tener un Gobierno más fuerte ante una derecha que ha crispado y ha intentado desestabilizar", Zapatero ha admitido: "Necesito una mayoría más amplia y es ante todo Catalunya la que me la puede dar, y confío en que me la dé el 9 de marzo".

"Codo a codo" con Montilla
Zapatero se ha comprometido hoy a trabajar "codo con codo" los próximos cuatro años con el presidente de la Generalitat, José Montilla, para que Catalunya "vuelva a llegar líder a la meta en progreso económico, políticas sociales y convivencia".

En un mitin en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) ante más de 6.000 personas, Zapatero expresó su agradecimiento a los ciudadanos de esa ciudad y de toda Catalunya "que han padecido las consecuencias de las obras del AVE".

El socialista aseguró que el Gobierno "ha dado la cara" y no se ha escondido, y auguró que Catalunya será el "eje clave de las comunicaciones por alta velocidad del sur de Europa". "Esta va a ser la comunidad que va a tener una red de conexión de alta velocidad mejor, que une todas las capitales, que une a Catalunya con el centro de España, con todas las regiones y con Europa", apuntó Zapatero, que afirmó que Catalunya será la "gran plataforma de liderazgo" en este sentido.

"Dimos la cara y sólo hay errores cuando se hacen cosas", señaló el socialista, que pronosticó que las grandes obras que hay en marcha en Catalunya "van a cambiar" la comunidad para décadas, como sucedió en los años 80 y 90 con las inversiones del Gobierno de Felipe González para la celebración de los Juegos Olímpicos de 1992 y la transformación de Barcelona.

"Ahora, un Gobierno socialista acomete de verdad otra gran transformación de las infraestructuras, porque hoy es el momento de todo el periodo democrático que más se está invirtiendo en Catalunya, en ferrocarril, en AVE y en Cercanías, en carreteras y en el aeropuerto", afirmó.

Todo ello va a permitir, según él, un "nuevo empuje al desarrollo económico" de Catalunya, un "nuevo liderazgo" para la comunidad, con un Estatut que compromete inversiones en el tiempo para "recuperar el déficit de inversiones de todos los años de gobierno de las derechas".