Foto GP Brno 2006 - www.rossimania.com

Si hablamos de agresividad, inteligencia, fuerza mental y afán de superación, estaríamos hablando de cualidades que podrían definir a unos cuantos personajes a nivel mundial, sin embargo, si a esos adjetivos le añadimos, 46, italiano y Yamaha, ya no queda ninguna duda de que estamos hablando de -Il Dottore-, de Valentino Rossi.

Este año el mundial de motoGP, ha sufrido la convulsión que han provocado pilotos jóvenes, con ganas de victoria, que accediendo desde la categoría del 250, han irrumpido con fuerza en un escenario en el que, Valentino era el rey y señor, tanto en las pistas como mentalmente.

Lo que se suele decir, les tiene ganada la moral a todos.


Pero este año, las cosas no empezaron bien, y primero por problemas de puesta a punto y por una caída a media temporada, Rossi, se vio relegado en la clasificación del mundial, atrás, muy atrás (creo que llegó a estar a más de 70 puntos de Hayden, el actual líder). Pues bien, después de la carrera de hoy en Australia, Valentino ya está en segunda posición y lo más probable es que en las dos carreras que restan para finalizar el mundial, dé buena cuenta de Hayden, en el final más emocionante que jamás he visto, emocionante porque él ha tenido que remontar lo que nadie creía que fuera posible, salvo él mismo.


Personajes como él, deberían ser un modelo para los que en su misma especialidad, compiten por el puesto inmediatamente posterior al suyo, o sea el sub-campeonato. Los Pedrosa, Stoner, Elías, pilotos jóvenes de la categoría, tienen la obligación de anotar en sus cuadernos, como se trabaja mentalmente para ser el campeón y lo mismo pilotos consagrados en motoGP como Capirossi, Gimbernau, Melandri, Roberts jr. etc. asi como para cualquiera, en especialidades deportivas distintas o hasta incluso en la vida profesional normal o privada.


Valentino está saliendo a exhibición por carrera, demostrando que quiere ganar en la actividad más fútil. Eso, la convicción de ser el más fuerte y esa ilusión por los retos que aún le esperan, pueden llevarle en poco tiempo a correr el mundial de la F1 con la escudería Ferrari, con lo que el motociclismo perdería al mejor piloto de todos los tiempos y el automovilismo ganaría al que de buen seguro sería el futuro campeón, a poco que se lo proponga.


En la vida todos tenemos que fijarnos nuevas metas cuando hemos alcanzado las que nos habíamos impuesto, a fin de no caer en la rutina del día a día. Quien sepa hacer esto tendrá garantizado su superación como persona y no me cabe la menor duda de que Rossi, así lo hará.

Chapeau, Dottore. ¡!!