Para alguien como Artur Mas, cuya última aspiración es volver a gobernar, sería un error seguir con el discurso de la "alianza de perdedores" durante 4 años ya que tanto aquí en Catalunya como en el parlamento español, CiU puede trabajar constructivamente desde la oposición como ha hecho hasta ahora durante los 30 años de democracia dando la estabilidad necesaria en momentos realmente delicados para la historia común y llegar a ser tan determinante como lo ha sido en la negociación de l'estatut.

Ignoro si CiU va a volver a gobernar Catalunya o no en poco tiempo, no tengo la bola de cristal para asegurarlo, lo que si creo es que para recuperarse del desgaste de 23 años de gobierno, es bueno pasarse una temporada en la oposición, entre otras cosas porque permite rearmarse frente a los años venideros, renovar las caras de sus dirigentes y adaptar el mensaje de la federació a lo que actualmente nuestra sociedad esta demandando.

En esta legislatura se desarrolla el estatut y es bien conocida la posición de ERC al respecto de la LO que deberá desarrollar conformando parte del tripartito, en frente el PSC/PSOE con una actitud totalmente enfrentada a los republicanos y contraria en el reciente referendum de reafirmación, con lo que es mas que evidente que quien va a recibir de lleno el impacto de esas negociaciones y de su resultado van a ser otros, no CiU que ahí sólo puede ser beneficiario del éxito de sus propuestas y del fracaso de la de los demás.

El no tener la responsabilidad de decidir pero si la posibilidad de hacerlo (echando cuentas tanto a nivel del Parlament como del Congreso es evidente que es así) le da a CiU un juego que tendría que aprovechar y no perder más el tiempo con el mensaje de la alianza de perdedores, que es otro error como lo del DVD o la visita al notario.

Los votantes de CiU aspiramos a que nuestros líderes sean capaces de ofrecernos otras cosas, por de pronto más madurez al encajar no estar al frente del gobierno, ocasiones en el futuro no nos van a faltar para evidenciar lo contario.